El Lobo ha sumado puntos importantes en las últimas fechas y eso ha cambiado el ánimo en el plantel que no podía alcanzar el triunfo en condición de dueño de casa.
La única mala noticia que se trajo en el bolso de regreso a Mendoza el entrenador Joaquín Sastre fue la lesión del arquero Braian Olivera.
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El arquero sufrió un traumatismo en la mano donde tuvo una fisura que lo obligó a dejar la cancha a los 26 minutos de la primera parte. La buena noticia es que, tras los estudios realizados en el arranque de la semana, la zona no tiene ninguna fractura ya que el golpe fue en las partes blandas. Será sometido a fisioterapia y todo apunta a que podrá decir presente en la próxima jornada.
El Lobo ya tiene en mente un nuevo objetivo: All Boys, rival que recibirá el próximo domingo en el Víctor Legrtaglie desde las 16 horas. La idea es esperar a Olivera hasta último momento y todo indica que el uno podría estar del vamos. En caso de no recuperarse, su lugar lo ocupará nuevamente Kevin Humeler.
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La buena novedad para el técnico blanquinegro es que ya podrá contar con Alejandro Gutiérrez, quién ya cumplió la fecha de suspensión tras ser expulsado en la victoria contra Defensores de Belgrano. Mientras que Maximiliano Padilla seguirá afuera, recuperándose de su desgarro.