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Infantino anunció un Mundial de clubes de 32 equipos, un presupuesto de once mil millones de dólares para la FIFA, pero tuvo graves “olvidos”

Se jugará en Marruecos desde 2025, será cada cuatro años y tendrá el formato de una Copa del Mundo. No se dieron a conocer los detalles sobre su clasificación, algo que será especificado en el futuro

16/12/2022 13:29

El presidente de la FIFA, Gianni Infantino, anunció para 2024 un Mundial de Clubes de 32 equipos de los seis continentes, sostuvo que el de Qatar es “el mejor Mundial de la historia”, adelantó que posiblemente haya dos ventanas mensuales al año sólo para partidos de selecciones nacionales, entre tantos temas que desarrolló en una conferencia de prensa, pero no se acordó del futbolista iraní Amir Nasr Azadani, condenado a muerte por apoyar la manifestación de las mujeres de su país contra la represión del régimen de ese país.

No hubo una sola pregunta (apenas una, en total, en idioma español) entre los periodistas que tuvieron la posibilidad de utilizar el micrófono en la conferencia de prensa, acerca de la condena al futbolista iraní, pese a que ya fue apoyado por el sindicato mundial de jugadores (FIFPRO). Tampoco se le consultó al presidente de la FIFA acerca de por qué la entidad decidió otorgarle el arbitraje de la final entre Argentina y Francia del próximo domingo, al polaco Szymon Marciniak, siendo que pertenece a la Unión Europea de Fútbol (UEFA) igual que el equipo galo, algo que la entidad suiza propende a rechazar para tratar de que todo sea lo más neutral posible, y por lo tanto, el juez de ese trascendental encuentro debió ser de otra confederación, la Concacaf, la africana, la asiática o la oceánica.

La conferencia de prensa de Infantino comenzó con una hora de retraso, lo que mereció un pedido de disculpas del presidente, debido a que a su vez terminó más tarde de lo pensado la reunión del Consejo de la FIFA, del que, dijo, surgió “una alabanza unánime” a la organización del Mundial, al que calificó como “la mejor Copa del Mundo hasta la fecha”.

Infantino dijo que este Mundial, hasta ahora, fue visto por 3,27 mil millones de personas contra 3,07 de Rusia 2018 y con una asistencia media a los partidos de 52 mil espectadores y 80.000 a los fan fest, mientras que la asistencia máxima se produjo en el partido Argentina-México por la fase de grupos.

Destacó que por primera vez en la historia hubo selecciones de los seis continentes en los octavos de final y que también fue la primera ocasión en que una mujer, la francesa Stephanie Frappart, dirigió un partido del torneo, “y lo hizo maravillosamente” (Alemania-Costa Rica). También detalló que hubo “cerca de 80 mil periodistas acreditados y 20 mil voluntarios”, a los que agradeció su trabajo.

En otro orden, Infantino comentó que el Consejo de la FIFA aprobó un superávit de 7500 millones de dólares (mil más que el anterior) y que se prevé para el próximo ciclo de cuatro años (para el que será reelecto en marzo, en Ruanda), 11 mil millones, de los cuales 10.000 irán al fútbol, y que 200 de esos 10.000 serán para desarrollar proyectos de talentos a cargo del entrenador francés Arsene Wenger.

“Que casi aumentemos al doble el presupuesto de los próximos cuatro años, se debe mucho al Mundial de Canadá, Estados Unidos y México porque habrá más equipos, más sedes, más partidos, más ingresos por transmisiones y hasta estadios más grandes porque en Estados Unidos se utilizan para el soccer los mismos que para el fútbol americano y se espera la llegada de 5,5 millones de aficionados”, destacó, al tiempo que recordó que la FIFA “es la única entidad que comparte con el fútbol todo lo que ingresa”.

El presidente de la FIFA anunció también un nuevo torneo de clubes, el Mundial, que ya debió implementarse en 2021 pero que se pospuso por la pandemia y que se jugará entonces en 2025 y que será de treinta y dos equipos de los seis continentes, aunque el formato se decidirá más adelante, mientras que el mundialito de clubes correspondiente a 2022 se disputará en Marruecos del 1 al 11 de febrero próximos. Las próximas dos ediciones serán en Emiratos Árabes Unidos en 2024 y en Islas Seychelles en 2025.

Otro tema que abordó Infantino es el de las ventanas FIFA para partidos de selecciones nacionales para los próximos años y se decidió que se abran diez días en marzo de los años pares para mini torneos internacionales, pero con la condición de que en ellos participen equipos de cuatro continentes distintos, una forma que tiene la entidad madre del fútbol que acercar al resto de los continentes a Europa, que estaba cerrada a jugar esta clase de encuentros.

También se decidió que en 2024 se otorgue la sede del Mundial masculino de 2030 (en el que podría participar Argentina de la puja, sumada a Uruguay, Paraguay y Chile en una postulación conjunta) y en 2025, el femenino de 2031, para permitir que haya seis años de trabajo en la organización. Por otra parte, Infantino dijo que se tratará de crear el Mundial de Clubes femenino y de ampliar a 16 la cantidad de seleccionados en el torneo femenino olímpico (por ahora, son 12).

El presidente de la FIFA también quiso abordar el tema de las comisiones que reciben los agentes en las transferencias, las que, sostuvo, serán desde ahora “mucho menores”, en tanto que habrá una enmienda al Código Ético y Disciplinario de la FIFA.

Más allá de los números, Infantino no tuvo problemas en responder las escasas preguntas de los periodistas presentes, casi todas relacionadas con el juego. Cuando por fin llegó una referente a la prohibición del uso de los colores del Arco Iris en la cinta de capitán por parte de uno de los equipos, que representa al colectivo LGTB+, el `dirigente ítalo-suizo respondió que hay 211 asociaciones de todo el mundo afiliadas a la FIFA y que estaba ·”muy orgulloso del apoyo que he recibido” y que en cada cultura “hay distintas inquietudes y nos tenemos que ocupar de todo. No se trata de prohibir sino de respetar los reglamentos. Todo el mundo puede expresar sus opiniones pero en el momento de jugar al fñutbol hay un reglamento que respetar”.

Finalmente, salió en defensa de Qatar al señalar que “gente de todo el mundo que vino pudo descubrir el mundo árabe y que todo era distinto a lo que le habían contado. Ellos se prepararon para dar la bienvenida al mundo y ese es el mayor legado, que cuando regresen a sus casas van a contar sus experiencias, aunque no es un legado relacionado con el fútbol.

Una periodista de la TV sueca le preguntó por la cifra de muertes de obreros en la construcción de estadios y dijo que eran alrededor de cuatroscientos y no tres, como señaló la FIFA. “Yo creo que cada víctima mortal es una tragedia -respondió Infantino- y las cifras que se mencionan son dispares. Ese número que usted dice es desde 2014 y debemos ser precisos para evitar dar una imagen de otra cosa. Estamos llegando, sobre esto, a un acuerdo con la OIT y aprovecharemos el Mundial para mejorar este tema”.

 

 

 

 

 

 

 

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