El intendente de La Merced, Javier Rafael Wayar protagonizó un escándalo en la tarde noche del jueves, cuando cruzó al presidente del Concejo Deliberante, Horacio Santiago Huerga, y se le fue al humo con ademanes violento insultándolo y amenazándolo de muerte, que, si no hubiera interferido el concejal Torres y otros funcionarios como el secretario de Obras Públicas, el hecho podría haber sido peor.
“Sos un hijo de puta, sos una porquería, tu familia es una basura, sos una mierda de persona; todo lo que hagas en tu vida, te va a ir mal”, espeto el jefe comunal fuera de sí, sin preocuparse de los funcionarios y otros ocasionales testigos que en ese momento transitaban por la plaza principal del lugar.
Luego empezó a empujarlo al joven presidente del Concejo mirándolo fijamente y poniendo su rostro casi sobre el del edil, diciéndole “no te hago cagar porque hay gente, no te mato porque hay gente, te voy a hacer seguir adonde vayas; te voy a cagar matando. Yo personalmente donde te cruce te voy a matar", dice textualmente la denuncia presentada anoche por el agredido Huerga.
Estaban presentes el concejal Enrique Humberto Torres, el secretario de Obras Públicas del municipio, y la jueza de paz, doctora, Blanca de Correa. El presidente del Concejo presentó la denuncia policial y solicitó al fiscal de turno protección de su persona y de su familia.
La bronca de Wayar tiene un motivo innegable: el presidente del Concejo es el que descubrió las transferencias irregulares del municipio a tres concejales oficialistas, por fuera de las dietas que cobran lo mismo. La certificación de ese movimiento de fondos lo certificó el Banco Macro y ahora el caso está en manos de la Fiscalía de Delitos Complejos y si resuelve rápidamente el caso, le puede costar el cargo al intendente y a los tres concejales porque se trata de un desvío de dinero totalmente irregular porque se realizó en momento en que Wayar retenía los fondos del Concejo con el argumento de la crisis. La denuncia constituye varios cargos contra el iracundo Wayar: administración fraudulenta, retención indebida de fondos, e incumplimiento de los deberes de funcionario público.
Wayar es el mismo que evitó un debate televisivo a una semana previa de las elecciones, denunciando que había sido víctima de un ataque violento, mostró ventanas rotas, también daños de su camioneta, pero no supo identificar a los supuestos agresores, pero le valió para conmocionar al pueblo y ganar las elecciones de forma reñida. Hoy, la violencia aparece nuevamente pero de su lado.