Fernando Sabag Montiel, imputado por gatillar un arma contra la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner, y su novia, Brenda Uliarte. Fueron llevados en las últimas horas de este martes a los tribunales federales de Comodoro Py.
El hombre de 35 años se negó a ser indagado por segunda vez luego de ser llamado por la jueza María Eugenia Capuchetti, pero poco antes de las 22 dijo: "Brenda no tuvo nada que ver (con el ataque)".
Un rato antes, Brenda Uliarte había negado la acusación. Pero a pesar de sus estrategias de defensa, los investigadores creen que entre los dos planearon matar a Cristina Kirchner, el pasado jueves 1 de septiembre, cuando Sabag le puso una Bersa calibre 32 a centímetros de la cara y gatilló.
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La novia del agresor fue indagada por primera vez ayer en los tribunales de Comodoro Py. Después de su detención el domingo a la noche, y Sabag Montiel por segunda. A los dos se los acusó de haber organizado con premeditación el atentado contra Cristina Kirchner. También de falsedad ideológica porque en la casa en la que vivían en la localidad bonaerense de San Martín se encontraron dos certificados de discapacidad de la Municipalidad de Quilmes que eran falsos.
Imputación conjunta por nuevas pruebas que se incorporaron a la causa:
- Imágenes que muestran que el jueves pasado Sabag Montiel y Uliarte llegaron juntos a la esquina de Juncal y Uruguay, en Recoleta. Cuando ella negó públicamente el viernes de no ver a su novio hace dos días.
- Fotos que se obtuvieron de la tarjeta del celular de Sabag. Allí se ve a ella posando con la Bersa en la cintura y a él en un primer plano con el arma. Pruebas que datan de mayo pasado.
- Las investigadores también tienen imágenes de la pareja que son del miércoles 31 de agosto, en la esquina del edificio de Cristina Kirchner.
En la tarde de ayer, cerca de las 17 horas, ambos detenidos llegaron por diferencia de algunos minutos a los tribunales de Comodoro Py con un fuerte operativo de seguridad de la Policía Federal y de la Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA). Primero fueron llevados al quinto piso del edificio a entrevistarse con sus defensores oficiales. Ella con Gustavo Kollman y él con Juan Martín Hermida. Lo hicieron en momentos distintos. El operativo de seguridad preveía que no tengan ninguna posibilidad de cruzarse.
Luego fueron llevados al despacho de Capuchetti, en el tercer piso. A los dos les exhibieron el arma y las fotos. Ella negó haber participado en la planificación del intento de homicidio. Dijo que estuvo en el lugar, que no sabía las intenciones de su pareja y que de haberlas conocido no hubiese ido. Calificó el hecho como aberrante y que más allá de las diferencias políticas que puede tener con Cristina Kirchner no le tiene odio ni avala lo que ocurrió. Solo contestó unas siete preguntas de su defensor que fueron en el mismo sentido de desvincularse del hecho.
Luego habló por teléfono con su papá y fue retirada del edificio. Con ese operativo finalizado entró al juzgado Sabag Montiel. Solo dijo que su pareja no estaba vinculada al hecho. Los dos cambiaron su lugar de detención. Ya no están en dependencias de la Policía Federal. Ahora quedaron bajo la custodia de la PSA.