Un incendio subterráneo en Guaymallén, que había obligado a paralizar la construcción de casas en un lote en agosto de 2022, volvió a activarse provocando la quemadura sufrida por un niño en una de sus piernas. Hace meses había provocado tres heridos leves en el predio donde, por el momento no se encuentran respuestas, para el fenómeno.
Este fenómeno generalmente no produce llamas y emite poco humo según los especialistas ya que el intenso calor se propaga bajo el suelo, quemando la materia orgánica acumulada a lo largo de los años y las raíces de antiguos forestales.
Según los expertos, su propagación es lenta, pero peligrosa. Además, su extinción es compleja porque solo se ve el humo, y la forma más efectiva de apagarlos es mediante lluvias.
El hecho ocurrió en un loteo ubicado en el kilómetro 8 de Guaymallén, donde antes había plantaciones. El lugar fue despejado para la construcción de viviendas y hace algunos meses, cuando empezaron a remover la tierra, los propietarios descubrieron el extraño fenómeno.
«Cuando encontramos los primeros focos, no le dimos importancia. Después nos dimos cuenta de que había fuego abajo, que se corrió entre 30 y 40 metros. Va por debajo de la tierra, como en galerías«, aseguró un vecino.
Personal de Bomberos, de Defensa Civil y de la Municipalidad de Guaymallén trabajaron en la zona, pero sin encontrar tampoco una explicación al fenómeno que provocó quemaduras en tres personas: una niña, un operario de Defensa Civil y otro hombre que realizaba zanjas.
En el predio hay 75 lotes y algunas familias ya comenzaron a edificar sus viviendas. Otras, en cambio, no pueden iniciar la construcción a raíz del incendio subterráneo.
«Una máquina municipal hizo perforación de unos dos metros y seguía saliendo caliente. Mientras intentamos apagar este incendio, no tenemos otra explicación sobre cómo llamarlo«, indicó el sorprendido vecino.
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