A tres años del crimen de Fernando Báez Sosa, el padre y la madre del joven asesinado participan de un homenaje en Dolores, más precisamente en el anfiteatro de esa ciudad, que es donde se está desarrollando el juicio contra los ocho rugbiers imputados.
Además, el obispo de Mar del Plata oficia una misa en Villa Gesell, frente a Le Brique, el boliche en el que mataron al joven, donde miles de personas se reunieron.
Fue alrededor de las las 19.30 cuando Graciela Sosa y Silvino Báez aparecieron abrazados delante de los presentes que se pusieron de pie, aplaudieron y gritaron "¡Justicia!", tras lo cual, el matrimonio se sentó en primera fila y comenzó el acto central.
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Primero encendieron unas velas, luego plantaron un jacarandá y seguidamente se cantó una canción. El evento también contó con la participación de la cantante Patricia Sosa.
"Queremos paz y justicia", aseguraron el padre y la madre de Fernando al anunciar la convocatoria en el anfiteatro local, a cuadras de los tribunales donde vienen asistiendo a las audiencias en el juicio.
Luego de haber sido destacados por su labor, todo el equipo defensor de los padres de Fernando, suben al escenario y se abrazan con Silvino Báez y Graciela Sosa, en medio de aplausos y gritos najo el pedido de “justicia”.